En las mañanas tranquilas, con calles casi vacías y hermosos paisajes rurales, arroyos y pequeñas lagunas para refrescarse, los pueblos de Córdoba ofrecen todo lo necesario para aquellos que desean descansar. Este pequeño destino, a poco más de una hora de la ciudad, es perfecto para desconectar.
En el Valle de Calamuchita, a 130 kilómetros del bullicio de la Ciudad Capital, Córdoba alberga un pueblo en el que los visitantes pueden disfrutar plenamente de la paz y la armonía. Se trata de Amboy, un lugar pintoresco que parece haberse detenido en el tiempo, con sus tradicionales tiendas de campo y pulperías que revelan su antigüedad en la provincia.
Actividades en este pueblo
Los alrededores del arroyo y el balneario Amboy ofrecen un entorno natural para relajarse. En esta zona, hay mesas y parrillas para disfrutar durante el verano, cuando después de un chapuzón en sus tranquilas aguas, la idea es culminar el día con un asado.
Además, desde esta localidad se puede llegar al embalse Cerro Pelado, un lugar ideal para practicar buceo y otras actividades acuáticas. También se puede emprender una caminata para llegar a una cueva peculiar.
Para aquellos que disfrutan de descubrir lugares con historia, en esta tierra nació Dalmacio Vélez Sarsfield, el creador del Código Civil de Argentina en el año 1800. Para conocer más detalles sobre su vida, se puede visitar el museo que lleva su nombre. A través de documentos y otros elementos, se puede aprender sobre la trayectoria política y personal de este estadista.
A pocos metros de este museo, se encuentra la capilla de San José, construida en 1885. La construcción de esta capilla llevó más de una década y fue realizada por una sola persona.