La Costa Argentina sorprende con sus hermosas playas, cada una con características únicas. En Las Grutas, uno de los destinos de playa más populares para los argentinos durante el verano, se encuentra un rincón especial que pocos conocen y que cautiva con sus acantilados.
Este lugar, conocido como El Sótano, está ubicado a unos 12 kilómetros al Sur de Las Grutas a lo largo del camino de los pulperos. Lleva este nombre por sus misteriosas cuevas naturales en los acantilados, que solían ser refugio de los recolectores costeros de pulpos, quienes conservaban frescas sus capturas dentro de ellas.
Al visitar este rincón, también se pueden explorar otras playas agrestes como Morella, Los Chañares y El Buque. Los caminos hacia estas playas son de arena y ripio, por lo que se recomienda llegar en un vehículo 4×4 y ser respetuoso con la naturaleza durante la visita.
Es importante tener en cuenta que, al tratarse de una playa agreste, no hay servicios disponibles en el lugar. Por lo tanto, se sugiere llevar agua, comida, sombrilla y, por supuesto, no dejar basura en el lugar. Además, es fundamental conocer los horarios de las mareas, ya que durante la pleamar existe el riesgo de quedar atrapado entre el agua y los acantilados.
Los acantilados y la restinga, que es una formación rocosa que se encuentra durante la bajamar, son tallados por la fuerza del mar, lo cual constituye un atractivo para los visitantes que realizan excursiones hacia Fuerte Argentino. Aunque se puede llegar hasta este lugar por cuenta propia, se recomienda realizar la visita acompañado de un guía especializado.
Además, cuando la marea baja, se forman piscinas naturales con el agua que queda atrapada. El paisaje cambia por completo y uno puede disfrutar de estos pequeños jacuzzis con vistas panorámicas al horizonte.